5 formas de eliminar completamente aplicaciones en MacBook

El uso del sistema operativo Mac abre muchas posibilidades para realizar acciones comunes que forman parte del día a día del usuario. La proliferación de programas y canales de acceso a contenido ha saturado a muchos ordenadores de apps, cuyo uso se limita a unos pocos días o incluso a unas horas determinadas. En la búsqueda de soluciones, cada vez más personas necesitan ampliar sus conocimientos sobre cómo eliminar aplicaciones en Mac para así tener más recursos y agilizar el proceso.

La diferencia de una aplicación, en comparación con otro tipo de archivos, es que la primera está instalada en varios espacios del sistema, por lo que arrastra una amplia cantidad de documentos que se quedan almacenados. Realizar la simple acción de arrastrar el icono del programa a la Papelera no aporta la solución deseada, pues todavía quedarían numerosos datos guardados por el ordenador. Por ello, hay que prestar atención a estas cinco formas para borrar una app de un Mac.

5 formas de eliminar completamente aplicaciones en MacBook

La Papelera, bien utilizada

Este proceso de desinstalación es el más antiguo, si bien se mantiene como práctico y eficaz. En el Finder se abren las aplicaciones y la app elegida es seleccionada. Hay que presionar las teclas Comando y Eliminar, y la selección se traslada a la carpeta de basura. El proceso no concluye aquí, ya que para conseguir que el programa se desinstale correctamente es necesario vaciar la Papelera.

Launchpad

Es otra solución manual para desinstalar una app del Mac, que requiere de la selección en el icono de Launchpad, ubicado en el dock. Aquí hay que seleccionar la aplicación y mantener pulsado el cursor hasta que el icono tiemble. Aparecerá una X situada en la esquina superior izquierda. Se pulsa y se confirma la eliminación. La app está eliminada, pero no así sus restos, que deben ser tratados manualmente.

Desinstalador nativo

Algunas apps están preparadas para ser desinstaladas desde una función específica, incorporada en ellas mismas. En ese caso, en la sección de Aplicaciones aparece una carpeta concreta para la desinstalación. Llegado a este punto, hay que seguir las instrucciones indicadas.

Programas especializados

La dificultad para eliminar aplicaciones en un Mac ha traído el desarrollo de programas externos que realizan esta función. El sistema los ha aceptado y encajado en su funcionamiento, sin que altere a la normalidad habitual en este espacio. Algunas de estas herramientas forman parte de la red de Apple. Su descarga es gratuita. Cuenta con una carpeta en la que recoge todas las aplicaciones del ordenador y el usuario solo tiene que seleccionar aquellas que desee eliminar y pulsar el botón correspondiente.

Apps de terceros

Es una vía menos común, pero que también puede resultar eficaz para cumplir con este objetivo. Al igual que las tres primeras, el sistema es manual, ya que exige al usuario la descarga de un programa concreto que realice esta tarea. Desde dicho espacio, se pueden seleccionar las aplicaciones elegidas y proceder a su desinstalación, en un proceso más complejo y tedioso que el mencionado en el cuarto punto. En cualquier caso, resulta una elección válida y que tiene algunas ventajas en cuanto a la organización y gestión de los programas.

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